Ingredientes:
1 bolsa de pan picado para migas
1 cabeza de ajos
1 pimiento verde
1 pimiento rojo
chorizo fresco
panceta ibérica de bellota
sal
agua templada
aceite de oliva virgen extra
Elaboración:
Ponemos el pan en una fuente honda. Rociamos con medio vaso de agua templada y un poquito de sal, y dejamos reposar.
En una sartén ponemos el aceite. Cuando esté caliente, echamos los pimientos cortados en tiras y freímos. En el mismo aceite, echamos la panceta cortada y freímos; y por último, el chorizo cortado en trocito y freímos. (reservamos todo).
En un perol, echamos el aceite ( un dedito, que cubra el fondo). Lo ponemos a calentar, y echamos los ajos enteros sin pelar ( se le hace una rajita para que no salten). Se doran y reservamos. En ese mismo aceite echamos el pan picado que teníamos en reposo con el agua, y empezamos a dar vueltas, a fuego bajo hasta que estén doradas. Unos minutos antes de terminar, echamos los ajos y le damos unas cuantas de vueltas. Servimos enseguida para que no se enfríen, acompañadas de todo lo que teníamos reservado.
Las migas se pueden tomar para desayunar o para comer al medio día. También se pueden acompañar con aeitunas y sardinas asadas.
Mmmm migas! Qué ricas! Los mejores platos del mundo los encuentro en este blog
¡Qué buena pinta y mejor que están! Casi tan buenas como las que nos hacía abuela!
Me encantan las recetas que pones.
Mis padres también son de Salvaleón.
Recuerdo las boronías que hacía mi madre, las puchas, las rosquillas, la “pringue roja”, y…la migas que hacía mi padre, los espárragos, los cardillos, los berros, etc.
No voy por Salvaleón desde que tenía 6 años, pero todavía conservo algunos recuerdos, sobre todo la Virgen de Aguasantas.
Felicidades por tu blog.
Un saludo.
Gracias por tu comentario. Lo que más me alegra es, que a través de él, te haya llegado un poquito de este hermoso pueblo. También, un homenaje a nuestros padres, que nos dejaron estas recetas. La cultura de un pueblo que debemos conservar.